Prepárate para una verdadera aventura culinaria con nuestra receta de Albóndigas al Horno y Salsa Picante. Esta receta combina la sencillez de los ingredientes tradicionales con un toque exótico gracias a la salsa picante. El resultado es un plato colorido y delicioso que llevará a tu paladar a un viaje fascinante.
Las albóndigas se fríen perfectamente hasta quedar doradas, quedando tiernas y jugosas, tal como deben ser. En cuanto a la salsa picante, combina dulzura y calor ardiente, agregando calidez y profundidad a cada bocado.
Si buscas una manera de cambiar tu rutina en la cocina, estas albóndigas al horno con salsa picante son una excelente opción para un viaje culinario audaz y satisfactorio. Ponte el delantal y prepárate para sorprender a tus invitados con este sabroso e irresistible plato.
Para preparar las albóndigas necesitarás 500 gramos de carne picada, un huevo, una cebolla finamente picada, dos dientes de ajo finamente picados, 50 gramos de pan rallado, además de sal y pimienta al gusto y una cucharada de aceite de oliva. Para la salsa picante, necesitarás 400 gramos de tomates enlatados, una cebolla finamente picada, dos dientes de ajo finamente picados, una cucharadita de hojuelas de pimiento rojo (o más, dependiendo de qué tan picante la quieras), dos cucharadas de aceite de oliva, sal al gusto y un poco de azúcar si es necesario para ajustar la acidez.
Comience precalentando el horno a 200°C. En un tazón grande, combine la carne molida, el huevo, la cebolla, el ajo, el pan rallado, la sal y la pimienta. Mezcle bien todos los ingredientes hasta que estén bien combinados. Forme la mezcla en albóndigas de tamaño mediano y colóquelas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Hornee las albóndigas en el horno durante 20-25 minutos, hasta que estén doradas y bien cocidas.
Mientras se cocinan las albóndigas, puedes empezar a preparar la salsa picante. En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla y el ajo y fríe hasta que estén transparentes. Luego agregue los tomates enlatados y las hojuelas de pimiento rojo. Deje cocinar la salsa a fuego lento durante unos 15 minutos hasta que espese. Asegúrese de condimentar la salsa con sal y, si es necesario, un poco de azúcar para equilibrar la acidez de los tomates.
Cuando las albóndigas estén listas, sácalas del horno y vierte sobre ellas la salsa caliente. Sirve las albóndigas con salsa picante sobre arroz, pasta o pan para completar una comida completa.
Aquí lo tenéis, albóndigas al horno con salsa picante. ¡Buen provecho!